Métodos de tortura de la Inquisición

                      MÉTODOS DE TORTURA DE LA INQUISICIÓN 

-El potro:La víctima era atada de pies y manos a los dos extremos del aparato. Era estirada lentamente hasta que todas sus articulaciones se dislocaban.

-Tormento de agua: Obligaban a las personas a beber cunetas llenas de agua. La cantidad era aproximadamente 10 litros continuos. El torturador se ayudaba de un embudo y le impedía respirar a la víctima, su estómago no aguantaba más y explotaba.

-La garrucha: Era uno de los métodos de tortura más recurrentes. Consistía en atar por la espalda las manos del prisionero, ponerle peso extra en los pies y colgarlos por las muñecas. Cuando lo ponían lo más arriba posible, lo dejaban caer sin tocar el suelo. Normalmente los brazos se dislocaban.

-Cuna de judas:Una adaptación mucho más violenta de la anterior, ataban a las víctimas por las muñecas, las levantaban con una polea y después las dejaban caer sobre una pirámide muy puntiaguda con finalidad de clavar su ano, escroto o vagina.